A sus 37 años el nombre de esta guayaquileña radicada en Miami consta en el libro Jewelry International, en el que también aparecen prestigiosas joyerías como Bvlgary, Chopard, Buchelatti, Cartier y de Grisogono. Aprovechamos la visita de Daniella Kronfle a la ciudad que la vio nacer para descubrir a la mujer que hay detrás de la gemóloga favorita de Thalía y adentrarnos poco a poco en el mundo íntimo de la diseñadora de las coronas de Miss Ecuador y Miss Continente Americano.

Su voz es fuerte, determinante y nada vacilante a la hora de decir lo que piensa. Sin embargo, cuando sonríe lo hace sin reservas y aquella primera impresión de una creativa con porte de empresaria cambia drásticamente para dar paso a un divertido diálogo que se extendió por cerca de una hora en la sala de su casa cuya decoración devela sobriedad, orden, buen gusto, arte y calidez.

Salud y bienestar

”Soy una mujer que vive pendiente de lo que come y del ejercicio, practico yoga. No le temo a la muerte, pero sí a las enfermedades. Así como me alimento sano, el fin de semana disfruto de la pizza y una hamburguesa con papas, duermo hasta la hora que quiero y me tomo un vinito. Luego regreso a mi estructura de trabajo y disciplina. Manejarte con un esquema te permite avanzar en la vida. Está en mis genes porque mi madre es así también”.

Sus admiradoras

“La primera celebridad en lucir mis joyas fue Bárbara Palacios, Miss Universo 1986, y lo hizo para ayudar a los niños con cáncer en Venezuela. Cuando ocurrió no lo podía creer porque no soy la única diseñadora de joyas en el mundo y en Miami tienes muchas opciones. Eso me motivó a querer más celebridades (ríe)”. Hoy la lista incluye a Thalía, Chiquinquirá Delgado (fotos), Ana Bárbara, Patricia Manterola, Jaqueline Bracamontes, Sonya Smith, Ana de la Reguera y Julieta Venegas.

Su esencia en cada joya

“En cada pieza única que hago (la elaboración tarda ocho semanas) hay dedicación y entrega. El proceso incluye la perfección en el trabajo, el pulido del oro, la limpieza, el engrase en piedras y la calidad de la misma. Soy muy exigente y cuando algo se exhibe en mi vitrina es porque pasó todos los filtros. El ojo fácilmente se enamora de algo bonito, cuando hay arte, se nota y con todas mis piezas me quiero quedar. La tendencia de ahora es el oro rosado en combinación con zafiros de colores, también predominan los anillos grandes, hasta dos en una mano y las pulseras con eslabones”.

Enamorada de Florencia

“Casarme en Florencia fue una experiencia maravillosa, mi conexión con esa ciudad es fuerte porque estudié allá mi carrera. Me marcó en muchos aspectos, cultural y artísticamente. Entrar en contacto con la orfebrería pura y la historia del renacimiento me dio el DNA como diseñadora. Esa ciudad es el centro cultural de las artes plásticas hasta hoy encuentras buenas escuelas para el diseño de joyas, modas, restauración y pintura. Sus maestros respiran arte porque han crecido en un museo viviente, se sienten orgullosos de transmitir sus conocimientos”.

Entre la lectura y la música

“Escucho de todo, desde música italiana hasta Armando Manzanero, The Beatles, The Doobie Brothers, Hall & Oates y Ambrosia. Como actores admiro a Meryl Streep y Jack Nicholson por la evolución de sus carreras. Lo que más disfruto es la lectura, por un tiempo leí a García Márquez, hoy me inclino por las biografías. He leído las de Napoleón, Julio César, María Antonieta, Frida Kahlo, Leonardo Da Vinci. Ahora leo El retrato de Dorian Gray, de Óscar Wilde.